En la curación de la tristeza, es vital aprender a nombrar correctamente nuestros sentimientos. Esta reflexión del maestro espiritual Osho aborda dos estados que a menudo se confunden: la soledad y la desolación. Mientras la desolación nos ata a la ausencia del otro, la soledad nos invita a un poderoso reencuentro con uno mismo.
El texto define a la desolación como un «estado negativo» de carencia y dependencia. En contraste, nos insta a abrazar la soledad como una presencia desbordante y autosuficiente. Este concepto es clave en los Elixires para el Alma, ya que transforma el miedo a estar solo en un camino hacia la plenitud interior.

Soledad
Cuando tú estás solo no estás desolado,
estás simplemente solo, y hay una
tremenda diferencia entre soledad y desolación.
Cuando tú estás desolado estás
pensando en el otro, extrañas al otro.
La desolación es un estado negativo.
Tú sientes que estarías mejor si el
otro estuviera ahí, tu amigo, tu esposa,
tu madre, tu amado, tu esposo.
Hubieras estado bien si el otro hubiera
estado, pero no está…
La desolación es la ausencia del otro.
Soledad es la presencia de uno mismo.
La soledad es muy positiva.
Es una presencia, una desbordante presencia.
Tú estás tan lleno de presencia que puedes llenar
el universo entero con tu presencia y
no hay necesidad de nadie.
Autor: Osho
Llenar el Vacío con la Propia Presencia
Osho nos ofrece una herramienta de transformación: la soledad no es un vacío que necesita ser llenado, sino un estado de presencia propia tan intensa que se vuelve autosuficiente. La tremenda diferencia entre soledad y desolación radica en el enfoque: ¿miras la ausencia del otro (desolación), o sientes la desbordante presencia de tu ser (soledad)?
Al interiorizar este concepto, la tristeza por la falta de compañía se disuelve. Podemos dejar de lado el «estado negativo» de la desolación. El propósito de este texto es recordarnos que el potencial para llenar el universo entero con tu presencia ya reside dentro de ti. Acepta este momento como un encuentro positivo y nutritivo, no como una carencia.


